La prostatitis bacteriana es una inflamación de la próstata debido a una infección -habitualmente de causa urinaria- que se propaga hasta la glándula prostática. Si esta infección se mantiene durante semanas o meses, se le llama prostatitis bacteriana crónica.
La prostatitis bacteriana se caracteriza por sus síntomas urinarios (frecuencia urinaria, escozor, hematuria) asociado a fiebre, habitualmente. Puede coexistir con síntomas digestivos como dolor al defecar o síntomas urinarios con la defecación, dolor abdominal bajo y dolor perineal.
Para diferenciar entre prostatitis bacteriana y otras causas de prostatitis no infecciosas, suele ser necesaria una historia clínica detallada. En el caso de que sea aguda bacteriana, solemos encontrar fiebre y algún antecedente urinario como, por ejemplo, un sondaje vesical o alguna otra manipulación urinaria. En caso de que no sea de origen bacteriano se orientan como producida por situaciones que "irritan" la próstata como, por ejemplo, una muy intensa actividad sexual y no es común que se asocie con fiebre.
La sospecha clínica de prostatitis obliga a la realización de análisis de sangre y orina. En caso de que los cultivos de orina o sangre sean positivos, el diagnóstico es de certeza. Además, puede que sea posible realizar una ecografía de próstata.
Su tratamiento se realiza a través de antibiótico durante un mínimo de 21 días. Asimismo, asociaremos antiinflamatorios y alfabloqueantes, para atenuar los síntomas y que el cuadro sea más llevadero. Es importante ver los resultados del cultivo de orina para poder ajustar el tratamiento antibiótico o cambiarlo en caso de resistencia.
Dicho esto, es importante tener en cuenta que cualquier situación en urología en la que se asocia patología urinaria y fiebre es potencialmente grave y es recomendable acudir a un urólogo. ROC Clinic es una clínica en la que se trata la prostatitis situada en Madrid que dispone de urólogos expertos en esta patología.